Queridas amigas, queridos amigos: Hoy, con la función ya en marcha, quiero detenerme un momento para expresar algo que tengo muchas ganas de decirles.
Desde la oficina que me tocó en suerte, como integrante del cuerpo del Honorable Concejo Deliberante de San Rafael, Mendoza, necesito contarles un montón de vivencias que he tenido desde el momento que supe que iba a asumir la gran responsabilidad de representar a la ciudadanía de mi departamento, a todos y todas ustedes —integrantes de mi querido Partido Solidario— y a los referentes que confiaron en mí, Carlos Heller y Juan Carlos Rivera.
Estoy aprendiendo, recibiendo consejos, y escuchando cada una de las necesidades planteadas y a resolver. Y me siento muy segura de algo: voy a cumplir con el mandato de quienes me votaron, respetando los compromisos que asumí en la campaña.
Quiero expresar también algunos otros agradecimientos: en primer lugar a mis padres. El día que juré como concejal fue indescriptible la cara de orgullo que ambos tenían. No se los puedo explicar con palabras, pero sus gestos me decían todo.
También a mis compañeras y compañeros de la cooperativa donde me formé en los valores solidarios, con quienes crecí y compartí tantas situaciones, de las buenas y de las otras, las que forman el carácter, porque no todas fueron rosas. Pero siempre avanzando en el mismo camino, tratando de sortear cada uno de los obstáculos que se nos presentaron.
A mis amigas, amigos y familiares, que siguen estando al lado mío en cada uno de mis pasos, advirtiéndome sobre las dificultades y acompañándome en todo momento.
A las y los integrantes del Partido Solidario, a quienes les digo que nada me va a hacer claudicar en mi compromiso.
¿Cuál es mi mayor deseo? Llevar bien altas las banderas de la justicia social, la inclusión y el cooperativismo. Porque entiendo que esos son los ejes en los que debemos desarrollar nuestra tarea militante para avanzar hacia una sociedad más justa y solidaria. No hay alegría más grande que trabajar con ese rumbo, como ya lo hicieron con tanta fuerza Néstor y Cristina y hoy lo hacen Alberto Fernández y nuevamente Cristina, en quienes confío plenamente.
Estaré en este lugar de lucha para lo que necesiten. Apoyando al intendente Emir Félix —que ha transformado con su accionar a mi querido San Rafael con un trabajo destacado por propios y ajenos—, a mis pares, a las y los dirigentes y a quienes entiendan que la Argentina merece todo nuestro esfuerzo para que se levante otra vez como una nueva y gloriosa Nación.
Los abrazo con todo mi amor.
