"UNO QUE CRUZÓ LA GENERAL PAZ"

10/07/2008

CARLOS HELLER LANZO EL PARTIDO SOLIDARIO EN LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES: El ex candidato a vicejefe de Gobierno ratificó su apoyo "autónomo" al kirchnerismo y avaló las retenciones móviles. Marcó así algunas diferencias con Aníbal Ibarra y Miguel Bonasso, sus socios en Diálogo por Buenos Aires.
El Partido Solidario, que encabeza el economista Carlos Heller, lanzó ayer su espacio en la provincia de Buenos Aires. Desde el microestadio del Club Atlanta, Heller manifestó su apoyo "autónomo" al kirchnerismo y defendió la intervención del Estado en la economía. El presidente del Banco Credicoop, que acompañó al senador del Frente para la Victoria Daniel Filmus en las últimas elecciones a jefe de Gobierno porteño, se ubicó dentro del sector que, con reservas, apoya las retenciones móviles. Este proceso de consolidación del nuevo espacio se da en el marco de un reacomodamiento de distintas fuerzas de centroizquierda, generado por el conflicto entre el Gobierno y las entidades rurales. Con este posicionamiento, Heller marcó algunas diferencias con el legislador porteño Aníbal Ibarra, con quien comparte Diálogo por Buenos Aires.
El progresismo tuvo, desde el inicio del conflicto con los ruralistas, un dilema profundo: qué posición tomar ante una medida intervencionista que el Gobierno atribuye a su intención de captar la "renta extraordinaria" de un sector beneficiado por factores externos y redistribuir esa riqueza. La respuesta a ese interrogante marcó diferencias de un espacio que hasta el momento no había mostrado fisuras. "Estamos ante un gobierno en disputa y frente a la disputa no somos ni seremos observadores neutrales. Tenemos una posición clara de autonomía no confrontativa", afirmó Heller ante unas 400 personas. El titular del Credicoop aseguró que ahora el Gobierno tiene "el desafío de llevar el discurso a la acción porque la batalla no es en contra de la pobreza, como plantean los organismos internacionales, sino por la distribución de la riqueza".
Ibarra se mantuvo, en cambio, al margen del conflicto y, aunque tiene una postura a favor de las rentenciones en general, fue más crítico de la medida kirchnerista. No participó de ninguno de los actos convocados en Plaza de Mayo y tampoco adhirió a una solicitada firmada por el intendente de Morón, Martín Sabbatella; el secretario general de la CTA, Hugo Yasky; y el propio Heller, entre otros. Dentro del propio ibarrismo también hay distintos puntos de vista frente al conflicto agropecuario. En la última movilización organizada por el oficialismo, se la pudo ver a la legisladora porteña Gabriela Alegre.
Cerca de Ibarra sostienen que para él, el Ejecutivo debió haber cedido hasta encontrar un punto intermedio que satisfaga a las dos partes. "Bajar un tres o cuatro por ciento las retenciones –explicaron– no significaba ser un entreguista. Ibarra tiene una postura más parecida a la de (Miguel) Bonasso." El sábado pasado, Bonasso votó a favor de la ratificación de las retenciones móviles.
Estas discrepancias con Heller no significan una ruptura del espacio, pero sí una diferenciación en un tema no menor. Este diario le preguntó al cooperativista si había algún diálogo con sectores afines como el SI, que votaron en contra del proyecto oficial e integran ex referentes del ARI disidente como Eduardo Macaluse o Carlos Raimundi. Pese a que lo consideró un espacio "interesante", su respuesta fue concreta: "En un momento vos tenés que decidir si te vas a parar de un lado o del otro." El ex vicepresidente de Boca admitió, en cambio, que tuvo contactos con la ministra de Salud, Graciela Ocaña.
Durante su discurso, Heller dedicó un párrafo a las divisiones que generó el conflicto agrario dentro del propio bloque del Frente para la Victoria. "Se van produciendo –dijo– realineamientos que mágicamente van aliando a los que antes estaban enfrentados."

Por Sebastián Abrevaya
(Diario Página/12)