El Cronista
Se ha hablado mucho sobre el reemplazo del presidente del Banco Central, pero hay que tener en cuenta que en estos últimos años las políticas económicas no se definieron ni en el Ministerio de Economía ni en el Banco Central, sino a partir de la aplicación de un proyecto político, económico y social que comenzó en 2003. Por eso creo que Alejandro Vanoli va a continuar con la línea económica que ya venía fijando el gobierno, consolidando la aplicación de la Carta Orgánica del Banco Central con una capacidad reguladora importante de la autoridad monetaria.
Por Carlos Heller
Prueba de ello son las primeras medidas que tomó, como subir la garantía de los depósitos para las imposiciones de menor monto, hasta $ 350.000, y al mismo tiempo poner un piso de tasa para esos depósitos vinculado con el interés que el Central les paga a los bancos por los fondos que toman en las licitaciones de letras. En definitiva, mejorar las condiciones para los depositantes de menor envergadura. En la reunión que tuvo con los representantes de los bancos privados de capitales nacionales y de capitales extranjeros les dijo, entre otras cosas, que el gobierno va a mantener su política cambiaria, toda una definición orientada a desalentar la especulación existente. Vanoli también les comentó que se van a profundizar las medidas orientadas a alimentar el crédito de inversión productiva, que es la línea que el BCRA viene dando ya hace más de dos años, destinando más del 62% a pymes, y que a junio de 2014 alcanzaba al 25,4% del total de préstamos a empresas. En definitiva, sostener el rol que el sistema financiero tiene que cumplir en función de la Carta Orgánica del Banco Central y en el marco de las políticas establecidas por el gobierno nacional.
Respecto al dólar, creo que hay que dejar de estar pendientes del dólar ilegal, una cotización que nadie sabe dónde se genera, pero que impacta en las expectativas, instalando una idea falsa de un retraso de la paridad. De esa forma, los negocios derivados de la especulación se solapan con las intenciones de generar incertidumbre económica y financiera, para abonar a la desestabilización.
Estas especulaciones también se montan en un hecho concreto, la restricción externa, que se intensificó en estos meses por la menor liquidación de exportaciones y por la baja de los precios de las materias primas, junto con una demanda por importaciones que sigue siendo fuerte, ya que si bien nos encontramos en un amesetamiento económico, se da en un nivel alto de producción que exige insumos y bienes de capital, tanto domésticos como importados.
Respecto al dólar ilegal, creo que el gobierno tiene que tomar medidas concretas, algunas de las cuales ya está aplicando, destinadas a desinflar las expectativas devaluatorias y actuar punitivamente sobre quienes alimentan esos mercados con toda la energía que las leyes le permiten, teniendo en cuenta incluso que, como ha circulado en estos días, en muchos casos estas llamadas ‘cuevas’ son terminales ilegales de entidades legales. De allí que se requiere aplicar la normativa con todo rigor.
