Tiempo Argentino | Opinión
Por Carlos Heller
No se puede pasar por alto —aunque desde ciertos sectores se trató de restarle relevancia— la activación del segundo tramo del swap de moneda con China, por el equivalente a U$S 6500 millones, disponibilidad que podrá ser aplicada a «objetivos de desarrollo del comercio bilateral y a la estabilidad de los mercados financieros en Argentina», tal como sostuvo el BCRA en un comunicado. Estos recursos complementan los U$S 5000 millones que se liberaron en un primer tramo, en junio pasado.
En la reunión que mantuvieron las autoridades de ambos países se analizaron también los avances en el financiamiento para obras de infraestructura en la Argentina por un total de U$S 23.700 millones, de los cuales U$S 14.000 millones ya fueron aprobados.
Los U$S 6500 millones de este segundo tramo se utilizarán, en parte, para completar los pagos de la deuda con el FMI. En este sentido, se anunció que en los próximos días se precancelarán las obligaciones de este mes, que suman unos U$S 2590 millones.
En la semana el precio de los dólares financieros (el MEP y el contado con liquidación) han venido aumentando debido a la cercanía de los comicios. Finalizados éstos, resulta importante el poder de fuego en el mercado de cambios que posibilita la ampliación del swap chino para aquietar las ilógicas cotizaciones alcanzadas y así despejar la incertidumbre que se viene tratando de instalar alrededor del dólar.
Otra cuestión que no hay que minimizar es la evolución del dólar ilegal, que en la semana mostró una fuerte caída, dando idea de la especulación que se monta sobre estas operaciones. Cabe señalar el accionar de las autoridades, que reforzaron los operativos y los controles en ese mercado. Éstos permitieron evidenciar el vínculo que existe entre el dólar ilegal con el contrabando, la evasión y el lavado de dinero.
No hay que perder de vista que estamos hablando de un mercado cuyas cotizaciones no tienen ningún basamento en lo que ocurre en la economía real y que no es transparente en absoluto. Todos los medios informan el mismo valor a cada momento, pero ¿de dónde sale ese valor uniforme, si las operaciones se hacen a sotto voce en las cuevas ilegales? ¿Quién lo informa?
Ante la baja de esta semana, un medio de comunicación concentrado puso en duda los mismos valores que éste informa y llegó a afirmar: «aunque en las pantallas el valor del tipo de cambio paralelo figura hoy a $ 900, en las cuevas de la ciudad se consiguió hasta a $ 1050». Todo muy difícil de comprobar. No obstante, es un buen ejemplo de cómo se trata de incidir en las expectativas y en el humor social.
Estado e iniciativas
Para ir recuperando los ingresos de la ciudadanía, en especial de los sectores de menores ingresos, el Gobierno continuó desplegando un conjunto de políticas públicas, algunas de las cuales detallaré a continuación. Tres millones de trabajadores/as informales fueron beneficiados/as por el ingreso extra de $ 94.000. Se otorgó además un adicional a los trabajadores/as de las micro y pequeñas empresas de $ 60.000 mensuales en dos cuotas, en el que el Estado asumió el costo mediante el pago a cuenta de contribuciones patronales a MiPyMEs: alcanza a 5,5 millones de personas. El Gobierno también determinó un refuerzo de $ 25.000 para las personas trabajadoras de casas particulares.
Los jubilados/as y pensionados/as que perciben el haber mínimo recibieron un aumento de $ 10.000 durante septiembre, octubre y noviembre en el refuerzo mensual, que pasó de $ 27.000 a $ 37.000. Son más de cinco millones de beneficiarios.
Adicionalmente, se amplió el monto del Programa Alimentario del PAMI, en $ 15.000 mensuales.
Por el lado del sector empresario, se estableció una moratoria para las MiPyMEs, con regularización de obligaciones vencidas hasta el 31 de agosto de este año, en 120 cuotas con una tasa de interés subsidiada: 4,14% mensual.
Los monotributistas, por su parte, se verán beneficiados por el diferimiento del pago del componente impositivo en sus obligaciones mensuales, se suspenden las exclusiones por superar el límite de facturación hasta la actualización de la escala el año que viene, y no habrá baja automática por falta de pago.
En materia de economías regionales, un sector fundamental para la actividad económica en ciertas provincias de nuestro país, se eliminaron las retenciones a las exportaciones con valor agregado industrial: vino, mosto, arroz y tabaco, entre otras.
En la sintonía de tratar de resolver la coyuntura y también incidir en lo estructural por la vía legislativa, se decretó para este año la devolución del IVA de los productos de la canasta básica para aquellos sectores de la población que más lo necesitan; luego se aprobó en el Congreso de la Nación una ley que impone similar medida a partir de inicios de 2024. También se convirtió en ley la elevación del mínimo no imponible hasta 15 salarios mínimos vitales y móviles para el pago del Impuesto a las Ganancias por parte de los trabajadores/as formales, con lo cual quedan alcanzados por el impuesto cerca de 90.000 trabajadores/as de más altos ingresos, mientras que unos 800.000 dejan de pagar el tributo.
Ya está funcionando la reducción de cargas sociales por un lapso de dos años para la contratación incremental de nuevos trabajadores/as (incluyendo jóvenes de 18 a 25 años) y regularización de empleados existentes, que llegará al 100% para las microempresas y al 50% para las pymes. Esta iniciativa también tiene media sanción en Diputados para aplicarse a partir de 2024.
Todas estas medidas tienen un espíritu progresivo y son esenciales para mejorar el poder adquisitivo de gran parte de la población. Es importante aspirar a un resultado fiscal equilibrado, pero nunca reduciendo o limitando los gastos esenciales, sino que dicho tránsito debe realizarse aplicando herramientas que permitan gravar a personas humanas y empresas que posean mayor capacidad contributiva, además de simplificar el sistema impositivo y reducir la evasión.
Muchas de las condiciones que hacen falta para proyectar un sendero positivo están dadas. En principio, el 2024 va a ser un año en el que no estarán presentes los efectos de la sequía, que le generó al país una merma de unos U$S 21.000 millones. A su vez se espera que haya un importante superávit energético gracias a proyectos como Vaca Muerta y la extensión de los gasoductos (decisión a la cual se opuso el FMI), marcando así el rumbo en materia de obra pública y de presencia del Estado.
Es preciso avanzar con la recuperación y mejora de los ingresos de aquellas personas que perdieron poder adquisitivo, así como también incentivar la producción de los sectores que agregan valor, de aquellos que generan exportaciones, y el consiguiente ingreso de divisas. Con más actividad económica se genera también una mayor recaudación impositiva y ése es el círculo virtuoso al cual hay que apuntar, de la mano de un Estado activo que incremente la producción mientras distribuye el ingreso de forma más equitativa.