Por: Carlos Heller
Fuente: PRESIDENTE DEL PARTIDO SOLIDARIO
América latina vive hoy un nuevo momento. Los vientos que surcan Venezuela, Brasil, Chile, Uruguay, Ecuador, Bolivia, Nicaragua, Paraguay y Argentina, más la histórica dignidad del pueblo cubano y su gobierno, marcan una nueva hora continental. Todos estos procesos, sin negar sus especificidades y diversos alcances, poseen un rasgo común: la necesidad de construir un proyecto regional que desde la diversidad de las realidades nacionales sostenga posiciones de autonomía y permita construir un futuro compartido.
Estas construcciones nacionales y regionales constituyen palancas emancipatorias para desmontar la herencia neoliberal hacia a un destino de liberación, soberanía y democracia, con justicia social y desarrollo económico al servicio de nuestros pueblos.
En nuestro país y en el actual contexto, no coincidimos con el supuesto de que la alternativa política se reduce a la opción de ser oficialistas u opositores. Asumimos que la batalla de unir lo diverso, apoyando lo positivo y criticando todo lo criticable desde nuestras posiciones autónomas, no resulta sencillo ni confortable. Las posiciones aparentemente principistas y/o testimoniales suelen parecer más impactantes, pero inciden negativamente en la búsqueda de acuerdos programáticos y coincidencias para conformar una alternativa política con claro sentido solidario y progresista.
El Gobierno está sujeto a presiones diversas, frente a lo cual no queremos ser observadores o analistas críticos. Pretendemos incidir para neutralizar los embates de la nueva derecha y afianzar el camino hacia un nuevo modelo económico, político y social.
Las fuerzas que enfrentamos son tan poderosas, que sólo una perspectiva miope o mezquina puede ignorar la importancia de la unidad de lo diverso para confrontar con lo antagónico. Sería imperdonables resignar la disputa en los espacios políticos y en la agenda electoral en nombre de un presunto principismo y no apostar a la unidad de los sectores populares y sus organizaciones.
Todos los esfuerzos son pocos para construir la unidad que permita vislumbrar otro futuro de dignidad.
Diario Clarín