09/12/2011 Tiempo Argentino
"Hernán Lorenzino es la continuidad de lo que se venía haciendo al frente del Ministerio de Economía. No imagino que haya cambios en la política económica."
Nota de Felipe Yapur - Periodista.
A las puertas de ser designado como presidente de la Comisión de Finanzas de la Cámara Baja, el diputado nacional por Nuevo Encuentro Carlos Heller pronosticó “un 2012 rico en la actividad legislativa”. Cauto, enfatizó que la designación la “tiene que decidir la Comisión”, y estimó que las comisiones tendrán “otro clima de trabajo y compromiso”.
En díalogo con el programa de Radio Nacional, “Una vuelta Nacional”, ratificó su impulso al proyecto de reforma financiera que promueve NE, y remarcó como “importantísma” la integración regional expresada en la Unasur y en la flamante Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC). Respecto a la designación de Hernán Lorenzino como ministro de Economía en remplazo del hoy vicepresidente electo Amado Boudou, Heller evaluó: “Los ministros son ejecutores de las políticas que fija el Poder Ejecutivo, cada uno en su área. (En economía) no me imagino que haya cambios, porque entra Lorenzino y sale Boudou. Creo que va a haber la misma política. (Lorenzino) es la continuidad de lo que se viene haciendo.” –¿Usted estará al frente de la Comisión de Finanzas que presidía Alfonso Prat-Gay con una mirada sumamente liberal? –Déjeme ser cuidadoso y prolijo en un tema, porque efectivamente yo conozco esa propuesta, pero eso recién se va a tratar el lunes y respetuosamente lo tiene que decidir la Comisión. Es decir, el lunes se van a constituir las comisiones, y hay una propuesta de que yo sea el presidente. Pero es la Comisión la que lo tiene que ratificar y hasta ese momento no soy el presidente.
–Entonces reformulo la pregunta. Ante la posibilidad de ser presidente de la Comisión de Finanzas, ¿va a haber un cambio en la mirada de los proyectos que se va a ver a partir de que no va a estar ya Prat-Gay en la presidencia? –Sí, por lo que leí en los diarios digamos que él sería el vicepresidente, con lo que se produciría un enroque con la situación que teníamos hasta ahora, porque él era el presidente y yo el vice. Pero esencialmente, obviamente lo que cambia a partir de ahora es la composición de las comisiones.
En primer lugar por el triunfo del oficialismo en las elecciones cambia notablemente la composición de la Cámara de Diputados y también porque el Grupo A ya no existe, y por lo tanto esa composición se dispersa entre distintos sectores. Así que efectivamente las comisiones van a tener otro clima de trabajo, otra visión y compromiso con lo que está pasando en el país. Creo que va a ser entonces un año rico en actividad legislativa.
–¿Se podrá avanzar en el proyecto de reforma financiera impulsado por Martín Sabbatella y usted? -Espero que sí. Si la mayoría parlamentaria tiene la vocación de apoyar esta iniciativa evidentemente podrá avanzar.
Yo estoy convencido, y el mundo es una demostración de eso, de que los sistemas financieros autor regulados han fracasado, son un desastre y lo único que han generado son problemas. Hay que avanzar en un cambio regulatorio moderno que ponga la actividad financiera al servicio de la actividad productiva, la satisfacción de las necesidades de la gente, de las empresas, de las regiones, etcétera. Pero también creo que hay que modificar la Carta Orgánica del Banco Central, y también habría que modificar la ley de inversiones extranjeras.
–¿La Argentina y la región no están exentas de algunos ataques frutos de las políticas neoliberales? –Sí, pero creo que lo que se viene haciendo allí es lo correcto, porque todos estos procesos de integración regional que se han ido consolidando, primero cuando se conformó la Unasur, y ahora con este nuevo organismo, la CELAC, que incluye a los países del Caribe y que incluso supera a Sudamérica porque incluye de México para abajo a toda la América. Son hechos importantísimos que creo que no se les está dando toda la trascendencia que tienen, pero que van a ir haciendo historia, por esta decisión y esta capacidad de concertar políticas defensivas, de integración comercial y productiva como las que plantearon Brasil y la Argentina la semana pasada.
–¿Qué opina de la propuesta de Chávez en el encuentro de la CELAC sobre la necesidad de volcar las reservas internacionales de cada uno de los países de Latinoamérica en un espacio común? –Lo que propone Chávez es más que interesante, pero para ser una realidad necesita lograr consenso. Son iniciativas que los países proponen y van abriéndose caminos que a veces demoran. Fíjese que el proceso de ratificación parlamentaria del Banco del Sur recién tiene cuatro países que lo han completado. De cualquier manera, la Unasur ha creado un consejo de ministros y presidentes de bancos centrales, que es un hecho inédito en la historia de la región.
–¿Qué le pareció la designación de Lorenzino, que va a asumir cuando Boudou se convierta en el vicepresidente? –Los ministros son ejecutores de las políticas que fija el Poder Ejecutivo, cada uno en su área. Y yo no me imagino que haya cambios porque salga Boudou y entre Lorenzino. Creo que va a haber la misma política, que significa también estar atento a las cosas que pasan y actuar frente a ellas, pero no porque cambie el ministro. Ahora, si hay una devaluación, para decir algo, o si explota Europa, seguramente habrá que tomar alguna medida y el ministro tendrá que actuar en consecuencia, y hará algo que hasta ahora no se hizo, porque no se estuvo frente a esa situación. Pero de lo contrario yo creo que, y lo digo como un elogio para que no se entienda mal, Lorenzino es más de lo mismo en el buen sentido de la palabra. Es decir, es la continuidad de lo que se viene haciendo.