Página/12 | Opinión
Por Carlos Heller
Los números recientes de la economía, que en general son muy buenos, muestran que el país comienza a recuperarse, no sólo de los efectos de la pandemia sanitaria, sino también de las fuertes caídas del PIB de 2018 y 2019. Esta evolución, a su vez, da una información clara de cuál es el sendero que se debe transitar.
La producción industrial manufacturera (Indec) se encontraba en septiembre de este año un 6,2 por ciento por encima de febrero de 2020, es decir, antes de la irrupción de la covid-19. El indicador ya está un 14,3 por ciento por encima del valor de septiembre de 2019, y es un 8,6 por ciento más alto que el de idéntico mes de 2018. En ese momento, recordemos, estaban ingresando los préstamos del FMI y arreciaban las políticas de ajuste fiscal y monetario, que tuvieron un gran impacto negativo en actividades como la industria y el comercio, que son dependientes del mercado interno.
Si bien el indicador sintético de la actividad de la construcción evidenció en septiembre una caída desestacionalizada del 2,2 por ciento respecto al mes anterior, en el acumulado enero/septiembre 2021 arroja un crecimiento del 1,9 por ciento respecto a igual período de 2019, superando los niveles prepandemia.
Las autoridades esperan que la economía crezca este año más de 9 por ciento, y algunas consultoras ya proyectan incluso un 10 por ciento. Quiere decir que casi se estaría recuperando la severa caída del año pasado. Esta situación es auspiciosa, dado que, por ejemplo, países como Reino Unido, Francia y España crecerán este año 6,8, 6,3 y 5,7 por ciento, respectivamente, pero no les alcanzará para recuperar lo perdido en el 2020 (proyecciones FMI).
La pandemia trajo una fortísima caída del empleo, pero éste se está recuperando a un ritmo importante. En agosto se incrementaron 54.600 puestos de trabajo registrados, acumulando en un año un total de 326.900 empleos. En cuanto a los salarios, en el trimestre julio/septiembre los registrados habrían recuperado algo más del 4 por ciento de su poder de compra; no así los no registrados, que vienen rezagados.
En este marco, no es de extrañar un repunte del consumo. Agrupando Supermercados y Autoservicios Mayoristas (en base a datos del Indec) se tiene que en el acumulado de 2021 (de enero a agosto) las ventas crecieron 2,6 por ciento respecto de igual período de 2019 en términos reales. Las de los supermercados registraron en agosto su mayor alza en 15 meses (desde mayo de 2020).
En materia externa, de enero a septiembre las exportaciones alcanzaron los 58.276 millones de dólares, el mayor nivel desde 2013. La balanza comercial marcó un saldo favorable de 12.322 millones de dólares, con una mejora de 4 por ciento respecto a los 11.837 millones registrados entre enero y septiembre del 2020. En este contexto, la gran limitación que pesa sobre la balanza de pagos es la deuda con el FMI, que se busca renegociar sin condicionar el crecimiento inclusivo de la economía.
Por su parte, según el Centro de Estudios Ferreres, en el año la inversión está mostrando “una marcada recuperación, tanto al comparar con 2020 como con los dos años anteriores, marcados por la recesión económica”. El dato de septiembre se ubica, según la consultora, un 20,4 por ciento por encima del mismo mes de 2020 y supera en un 8,4 pro ciento al de 2018.
La recuperación de la actividad, del comercio exterior y del mercado de trabajo, apuntalado por el empleo y los acuerdos paritarios, están repercutiendo positivamente en la recaudación fiscal, que mostró en octubre una suba interanual del 58,7 por ciento -en términos reales es la mayor desde 2015-. Si continúa este dinamismo, habrá más recursos y se podrán realizar más gastos, incluso por encima de los que están contemplados en el Presupuesto 2022.
Existen, no obstante, importantes disparidades y algunos segmentos vienen muy de atrás, pero las últimas políticas, como el programa “Previaje”, están enfocadas en dinamizar a estos sectores. Se están aplicando políticas que son claramente contrarias al ajuste.
En resumen, y con fuerte reducción de los contagios de covid gracias al elevado porcentaje de vacunación (59 por ciento con esquema completo, un 78 por ciento con al menos una dosis y ya se están aplicando terceras dosis a grupos específicos), están dadas todas las condiciones para que la economía, y el bienestar general, se sigan recuperando.