POR CARLOS HELLER / Presidente del Banco Credicoop y diputado electo
La confección del Presupuesto Nacional contiene las previsiones del Gobierno sobre la evolución de la economía, en función de las políticas económicas que se deciden aplicar. En el texto del Mensaje del Presupuesto 2010 se indica que "con respecto a los objetivos gubernamentales en materia de política pública, cabe mencionar, en primer lugar, que el empleo es el propósito fundamental del modelo de crecimiento que persigue el accionar del Gobierno Nacional.
En este sentido, durante 2010 se profundizarán las políticas orientadas a la generación de nuevos puestos de trabajo y a la regularización de la ocupación no registrada, ya que el empleo es la principal herramienta para mejorar la distribución del ingreso y la riqueza. Se entiende que el verdadero crecimiento económico es aquel que genera trabajo, de tal forma que la mejora de la economía es acompañada por la inserción y reinserción social de los sectores más relegados de la población". Un aspecto a destacar es la importancia otorgada a la economía social. Dice el mensaje que "las iniciativas y planes que surjan de la acción de gobiemo... tratarán de promover el desarrollo personal, cooperativo y comunitario, fortaleciendo el capital social y la economía local". Aparece expuesta la valorización de estos conceptos no capitalistas, que son los que garantizan una mayor equidad. Es una orientación de políticas relativamente nueva, coincidentes con el ideario cooperativo, y significan un cambio cultural, que esperamos se vaya potenciando con el tiempo. Estos objetivos permiten una reflexión, que nos lleva a pensar cuántos gobiernos basaron el marco de políticas del Presupuesto en estas premisas. Muy pocos. Es un enfoque digno de mención, porque la ideología que se tenga sobre la forma en que se desempeña la economía determinará a quién se le cobrará impuestos y cómo se repartirá el gasto. (25/09/2009 Revista Veintitrés)