Diario Uno de Santa Fe
El diputado nacional por la ciudad de Buenos Aires explicó los alcances del proyecto de ley que pretende ser "el puntapié inicial de la construcción de un sistema financiero más inclusivo”.
La discusión sobre el proyecto de ley de servicios financieros para el desarrollo económico y social avanza en la Cámara de Diputados. Mientras tanto, el diputado nacional por la ciudad de Buenos Aires, Carlos Heller, autor de la iniciativa, continúa recorriendo el país para dar detalles sobre los contenidos, el alcance y el sentido de la norma. Ayer, el legislador disertó en el Paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral.
El proyecto busca básicamente profundizar la presencia del Estado en el esquema de bancos, a través de la regulación de tasas y los créditos a pequeños y medianos empresarios. La disertación del diputado fue organizada por el Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos y la UNL.
Consultado sobre el proyecto de ley, Heller explicó que “en el propio título se puede observar la idea y el cambio: frente a una ley de entidades financieras, nosotros planteamos una ley de servicios financieros. Además no estamos hablando de las entidades sino de los usuarios, y no se pretende regular el funcionamiento de las empresas financieras sino de establecer la actividad financiera como un servicio público y un derecho ciudadano, de las empresas, de las regiones y de la sociedad en su conjunto”.
El legislador comentó que en la actualidad, el sistema financiero está regido por una ley que tuvo origen en la dictadura militar. “El hecho de que sus autores hayan sido Videla y Martínez de Hoz alcanzaría para justificar las razones por las que tendríamos que planteamos la necesidad de una nueva ley que regule el funcionamiento del sistema financiero. Como dijo el autor de la norma, ésta fue hecha «para marcar el destino del país». Fue concebida dentro de la ideología del Consenso de Washington, de la idea de apertura de los mercados, de que el mercado debía ser quien adjudicara y estableciera las reglas. Por lo tanto la base de esa norma es que los bancos pueden hacer todo menos aquello que tengan expresamente prohibido. Nosotros partimos del otro lado, los bancos pueden hacer sólo aquello para lo que están autorizados”.
En cuanto a las modificaciones propuestas en el proyecto, Heller comentó que “se establecen regulaciones respecto de la orientación del crédito, de su costo, de la concentración del sistema, de la distribución regional del crédito y se crean figuras nuevas como la del defensor del usuario de servicios financieros”, y añadió: “Si decimos que es un derecho, tenemos que establecer dónde ese derecho se puede defender cuando siente que no es respetado. Además se modifica el sistema de garantías de depósito haciéndolo general, obligatorio y más amplio que el actual”.
Por lo expuesto consideró que “es otra concepción para dar el puntapié inicial de la construcción de un sistema financiero más inclusivo y más cercano a las necesidades de la población argentina”.
El proyecto ingresó a la Cámara baja en el mes de abril y está siendo analizado por la Comisión de Finanzas. Asimismo se están realizando audiencias públicas que convocan a los sectores interesados para que expongan su visión respecto del tema. “Participan organizaciones de defensa de los consumidores, representantes de las pequeñas y medianas empresas, de asociaciones de bancos, y una vez escuchadas todas las posturas, se va a iniciar el debate. Nos parece bien que esto se discuta y se conozca en la sociedad”, concluyó.