Artículo publicado por: Carlos Heller
La semana pasada en la sesión del Parlamento cuando se trató el presupuesto 2012, Agustín Rossi hizo una cosa que me pareció muy ingeniosa. Tenía dos diarios, el Clarín del 14 de Diciembre de 2001 y el diario El País de España del 14 de Diciembre del 2011 (del día que estábamos sesionando). Fue notable ver cómo las noticias que El País tenía el 14 de diciembre del 2011 eran significativamente parecidas a las que tenía el Clarín sobre la Argentina del 14 de diciembre del 2001, una década atrás. Sonaba como que el reloj de la historia atrasaba una década. Si miramos lo que pasó aquí hace 10 años no podemos menos que estar preocupados por lo que está pasando en Europa.
El tema es si esto puede impactar de alguna manera en nuestro país. Yo diría que en la Argentina se han hecho las cosas bien, tenemos fortalezas importantes, a la macroeconomía se la ve sólida, y las cuentas fiscales están ordenadas. Podríamos decir que estamos en una situación privilegiada en relación a los riesgos que hoy puede deparar el escenario internacional, que tiene más incertidumbres que certezas porque ni ellos las pueden precisar. Las lecturas de sus diarios son escalofriantes, bancos a los que se les bajan las calificaciones, países a los que se les bajan las calificaciones, deudas soberanas que cada vez aparecen más complicadas, nuevos planes de ajuste que todos sabemos cómo terminan. Pareciera que ellos no terminan de entenderlo.
En la Argentina afortunadamente no le debemos demasiado dinero a nadie, de hecho la deuda externa que años atrás aparecía como un tema dramático, incluso recuerdo que decíamos que nuestros nietos y nuestros bisnietos seguirían con esta mochila, hoy en términos de producto bruto se ha convertido en algo muy chico, es necesario ir muy atrás en la historia para encontrar valores de esa significación.